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Mostrando entradas de octubre, 2012

¡Tú eliges!

Ustedes han sido salvados por la fe, y lo han sido por gracia. Esto no vino de ustedes, sino que es un don de Dios; tampoco lo merecieron por sus obras, de manera que nadie tiene por qué sentirse orgulloso. Efesios 2, 8 - 9 Biblia Latinoamericana Con estas palabras, Pablo busca el impacto del contraste entre un antes (muerte) y un después (vida). Un antes, donde la solidaridad en el mal pone a todos en pie de igualdad, tanto en el pecado como en la responsabilidad ante las consecuencias del pecado y que afecta a la sociedad humana entera. Un después, en el cual la oferta gratuita de Dios reúne a los creyentes en una comunidad solidaria en la salvación. De manera que antes, de que Dios Padre enviara a su Hijo Jesucristo, vivíamos en pecado (estábamos muertos) y por razón de Su gracia divina, no por las obras que hacemos, hemos sido salvados (llamados a la vida) a través de la muerte y resurrección de Jesús que pagó el precio de nuestros pecados. Y es así hermanos como med...

Relación entre la riqueza y la felicidad

Y les dijo: ¡Estén atentos y cuídense de cualquier codicia, que, por más rico que uno sea, la vida no depende de los bienes! No anden buscando qué comer o qué beber; no se angustien. Todo eso son cosas que busca la gente del mundo. En cuanto a ustedes el Padre sabe que las necesitan. Basta que busquen su reino y lo demás lo recibirán por añadidura. Lucas 12, 15 ž 29 - 31 La Biblia de Nuestro Pueblo Esta cita nos llama a la búsqueda del reinado de Dios como presupuesto único y fundamental para la vivencia de unas relaciones justas y para experimentar y gozar del valor principal de todos los hombres y mujeres: el don de la vida. Muchas veces asociamos la salvación, la vida plena, con la posesión de bienes y creemos que mientras más cosas tengamos seremos más felices. Jesús nos recuerda que no hay una relación directa entre posesiones y felicidad, y que si la hay hemos de entenderla a la inversa de cómo generalmente lo hacemos. Tenemos que salir de la lógica de la acu...

¿Cansado(a) de pedir y de esperar?

Sucedió que, al acercarse él a Jericó, estaba un ciego sentado junto al camino pidiendo limosna; al oír que pasaba gente, preguntó qué era aquello. Le informaron que pasaba Jesús el Nazoreo y empezó a gritar, diciendo: «¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí!» Los que iban delante le increpaban para que se callara, pero él gritaba mucho más: «¡Hijo de David, ten compasión de mí!» Jesús se detuvo, y mandó que se lo trajeran y, cuando se hubo acercado, le preguntó: «¿Qué quieres que te haga?» Él dijo: «¡Señor, que vea!» Jesús le dijo: «Ve. Tu fe te ha salvado.» Y al instante recobró la vista, y le seguía   glorificando a Dios. Y todo el pueblo, al verlo, alabó a Dios. Lucas 18, 35 – 43 (Biblia de Jerusalén) En esta cita, el evangelista Lucas nos enseña que no siempre, aunque se tengan intactos los cinco sentidos, se está en grado de conocer a Jesús y de optar por Él. Esto lo enseña Lucas puesto que los doce no entendían lo que Jesús les había revelado acerca de su final, s...

¿Qué es importante para tí?

¡Ay de ustedes, fariseos, que pagan el impuesto de la hierbabuena, de la ruda y de toda clase de verduras y descuidan la justicia y el amor de Dios! Eso es lo que hay que observar sin descuidar lo otro. ¡Ay de ustedes, fariseos que buscan los asientos de honor en las sinagogas y los saludos por la calle! Lucas 11, 42-43 En esta cita Jesús critica en tono de amenaza, denunciando el pecado de los fariseos para moverlos a la conversión. Aquí debemos poner nuestro nombre en lugar de la palabra fariseo, porque también por nuestros pecados murió Jesús en una cruz, porque también nosotros por lo externo, por lo mundano, hemos descuidado la justicia y el amor de Dios. Mientras demos mayor importancia a lo que no lo tiene, a las cosas del mundo, y no exaltemos las cosas de Dios no podremos crecer en santidad. Hoy en día, así como en los tiempos de Jesús, se insiste en las cosas que son insignificantes, descuidando las que son centrales a la fe. Los cristianos debemos concentrarnos...

Aprende a escoger la mejor parte

Yendo de camino, entró Jesús en un pueblo. Una mujer, llamada Marta, lo recibió en su casa. Tenía una hermana llamada María, la cual, sentada a los pies del Señor, escuchaba sus palabras; Marta ocupada en los quehaceres de la casa dijo a Jesús:    —Maestro, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en los quehaceres? Dile que me ayude. El Señor le respondió:    —Marta, Marta, te preocupas y te inquietas por muchas cosas, cuando una sola es necesaria. María escogió la mejor parte y no se la quitarán. Lucas 10, 38 – 42 En esta lectura vemos un ejemplo para discernir qué es más importante, lo que está establecido por la Ley y las prácticas culturales o la acogida a la novedad del reino. Marta cumple con lo ‘normal’, lo que mandan las normas de la acogida y de la hospitalidad; ella es símbolo de esa porción de pueblo que cree que con ‘cumplir’ ya está arreglado todo y por tanto el criterio de juicio para determinar el comportamiento de los otros es si cumplen ...

¿Y tú? ¿Cómo has respondido al amor de Dios?

¡Ay de ti, Corozaín, ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros realizados entre ustedes se hubieran hecho en Tiro y Sidón, hace tiempo habrían hecho penitencia vistiéndose humildemente y sentándose sobre cenizas. Y así, el juicio será más llevadero para Tiro y Sidón que para ustedes. Y tú, Cafarnaún, ¿pretendes encumbrarte hasta el cielo? Pues caerás hasta el abismo.   Lucas 10, 13 – 16 (La Biblia de Nuestro Pueblo) Tras el paso de Jesús por estas ciudades citadas por el evangelista San Lucas, se pone de manifiesto el sentir de Dios, cuando a pesar de Sus tantas manifestaciones de júbilo por Sus palabras y signos, aparentemente la mala memoria se apodera del pueblo. Lo que Jesús lamenta es la incredulidad de estas ciudades y su poco empeño en poner en práctica Sus enseñanzas. Toma un momento y vuelve a leer la cita anterior poniendo tu nombre en lugar de los nombres de las ciudades, pensando que en lugar del lamento contra Corazaín, Betsaida y Cafarnaún, Jes...